Cuidar nuestra voz
Para cuidar nuestra voz es necesario seguir unas pautas de higiene vocal que tienen que ver con la salud general. Esto se refiere a una serie de conductas que tienen por objetivo cuidar la salud de la laringe y de la voz evitando comportamientos que puedan causar una lesión en las cuerdas vocales y realizando otros que favorezcan el mantenimiento de una voz sana. Se trata de eliminar hábitos inadecuados y perjudiciales y favorecer otros positivos. El cuidado de la voz es un punto primordial para conservar la salud laríngea en cualquier individuo, aunque no tenga problemas de voz, pero más aún en profesionales de la voz: cantantes, docentes, locutores, comerciantes, etc. que necesitan la voz, su herramienta de trabajo, en plena forma.
La falta de conocimientos sobre higiene vocal, especialmente en los que hacen un uso profesional de la voz, es un factor que favorece la aparición de disfonías.
La prevención es el mejor modo de cuidar la voz
Los cuidados de higiene vocal deben centrarse en evitar el mal uso y abuso vocal. Cuando se abusa de la voz o se utiliza inadecuadamente se produce un esfuerzo muscular y una tensión exagerada. La laringe se debilita, y se fatiga la voz. Esta es la primera señal de alerta que nos da el organismo de que hay algo que no va bien. Si esta señal no se tiene en cuenta, los problemas se intensifican y se hacen crónicos.
La laringe sana empieza a dar señales de debilidad como consecuencia de la incoordinación del sistema fonatorio desde el punto de vista funcional o mecánico. La tensión muscular aumenta para conseguir el rendimiento vocal deseado y se establece un círculo de sobreesfuerzo vocal. Los hábitos incorrectos se vuelven habituales, pudiendo llegar a necesitar una terapia de rehabilitación de la voz con un especialista.
“Es mejor prevenir que curar”, dice el dicho popular. Habituarnos a realizar ciertas conductas resulta beneficioso para el órgano fonador y para la salud general de cualquier persona. Algunos buenos hábitos son el mejor modo de cuidar nuestra voz.

¿Cuáles son los aspectos más importantes para el cuidado de la voz?
- La hidratación es fundamental para cuidar la voz ya que la cuerda vocal está recubierta de mucosa y para que esta trabaje correctamente necesita estar bien hidratada. La hidratación ayuda a reducir el esfuerzo fonatorio y a aumentar la resistencia vocal. Por otro lado una mucosa bien hidratada genera un moco más fluido y menos espeso y se quedará menos adherido a las cuerdas reduciendo la sensación de carraspeo.La deshidratación eleva la presión de aire requerida para hacer vibrar las cuerdas vocales. El aumento del esfuerzo y el impacto entre las cuerdas puede producir un trauma en estas. La capa superficial de los pliegues vocales debe estar bien lubricada para disminuir la fricción de la vibración.
Consejos para mejorar la hidratación:
- Beber dos litros de agua diarios.
- Realizar vahos para conseguir una hidratación local de toda la vía respiratoria.
- Humidificar el ambiente
- No ingerir sustancias deshidratantes como la cafeína, el alcohol, la menta, medicamentos anthistamínicos o descongestivos nasales.
- Evitar ambientes de humo que irritan y resecan las mucosas.
- Controlar los ambientes con mucha calefacción y aire acondicionado que resecan las mucosas.
- Evitar comportamientos fonotraumáticos, es decir, conductas vocales que pueden dañar las cuerdas como gritar, hablar fuerte, hablar en ambientes ruidosos, hacer esfuerzos vocales cuando se padece un proceso inflamatorio agudo (catarro, etc.), carraspear y toser.
- Prevenir factores inflamatorios exógenos, o sea externos a la fonación pero que pueden dañarla, como el reflujo gastroesofágico, las alergias, el tabaco, inhalación de productos químicos, la polución, etc.
Es importante que cada persona asuma el cuidado de su propia voz que es indelegable e indispensable ya que la voz no es solo una herramienta de trabajo sino también nuestra forma de comunicarnos y expresar nuestros sentimientos.